Hotel VIVA MERIDA es un pequeño pero muy lindo espacio en donde encontrarás rincones pintorescos en el cual no puedes evitar tomar fotografías, el staff es muy amable y están a disposición todo el tiempo, inclusive nos reservaron un taxi para nuestra salida temprano.
El DESAYUNO fue muy completo, disfrutamos de un café, pan dulce, fruta, jugo y pan artesanal con mermelada hecha en casa y mantequilla al siguiente día nos organizaron un box lunch ya que nuestra salida fue antes de la hora del desayuno.
La HABITACIÓN que reservamos es estándar, bastante cómoda, cuenta con cama matrimonial, una pequeña sala, closet, cajoneras, mini bar con productos de snacks y bebidas (con costo adicional) el baño está en un piso alto , ojo, quizás está opción no es tan práctica para todos los viajeros, el baño no tiene puerta es un concepto nuevo diferente algo que también deberán tomar en cuenta.
En la parte alta de la habitación hay un tragaluz y un ventilador de humedad que por la noche da la sensación que te están mirando. El personal se encargó de hacerme un detalle muy especial por mi cumpleaños estoy totalmente agradecida 🙏🙏 , cuenta con una pequeña pero cómoda piscina, área de camastros y bar lounge hasta las 9:30 pm, también puedes rellenar tus botellas con el dispensador de agua que se encuentra junto a la recepción, el hotel es muy céntrico y vale totalmente conocer, Gracias viva Merida por todas las atenciones sin duda repetiremos la visita.