El hotel esta situado a pocos minutos de Solvang, la ciudad que visitamos en esta ocasión, las camas son cómodas y disfrutamos la estancia en familia, sin embargo carece de algunos servicios basicos, la habitación estaba en segundo piso pero no hay elevador, no tuve problema mas que subir las maletas, pero viajo mucho con mi madre de 80 años y eso hubiera sido un inconveniente.